La Unión Europea impuso una multa de 120 millones de euros a la red social X, propiedad de Elon Musk, por incumplir las normas de transparencia y por el uso considerado “engañoso” de su sistema de verificación de cuentas. La sanción, anunciada por la Comisión Europea, se convierte en la primera aplicada a la plataforma bajo la Ley de Servicios Digitales (DSA).

Según la investigación del bloque europeo, la insignia azul de X, que antes identificaba cuentas verificadas por autenticidad, pasó a ser un distintivo confuso para los usuarios, ya que podía adquirirse sin cumplir criterios claros de identidad. Además, Bruselas señaló falta de transparencia en el repositorio de anuncios y obstáculos para que investigadores accedieran a información pública sobre la plataforma.

La respuesta de Musk no se hizo esperar. Durante el fin de semana, el empresario lanzó una serie de mensajes en X en los que calificó a la UE de “censora”, “corrupta” y “antidemocrática”, llegando incluso a preguntar cuánto tiempo le queda al bloque antes de “desaparecer”. También apoyó la idea de realizar referendos en los países miembros para decidir si deben permanecer en la Unión.

Medios como Business Insider reportaron que Musk incluso compartió memes comparando a la UE con regímenes autoritarios, mientras que CatalunyaPress destacó que el magnate acusó a Bruselas de “asfixiar la innovación” y poner en riesgo la competitividad tecnológica del continente.

La sanción ha generado tensiones diplomáticas. De acuerdo con France 24, el gobierno de Estados Unidos calificó la multa como un “ataque” contra empresas estadounidenses, mientras que la UE defendió su decisión como una medida para proteger a los ciudadanos y garantizar reglas claras en el entorno digital.

La Comisión Europea advirtió que X deberá corregir sus prácticas para evitar sanciones adicionales, mientras continúa el debate global sobre la regulación de las grandes plataformas tecnológicas.