La Superintendencia Nacional de Salud (Supersalud) ha lanzado un contundente 'Plan de Choque Nacional' con una duración inicial de nueve meses para enfrentar la crisis histórica en la entrega oportuna de medicamentos en Colombia. La medida busca garantizar de forma inmediata el derecho fundamental a la salud de miles de pacientes afectados por demoras que se extienden por semanas e incluso meses.
El plan responde a un incremento histórico en peticiones, quejas y reclamos (PQR) por barreras de acceso a tratamientos. Las cifras presentadas por la Defensoría del Pueblo son alarmantes:
Las tutelas en salud han crecido exponencialmente, pasando de 92.372 en 2021 a 256.173 en 2024. Se proyecta que el año cierre con 314.658 tutelas.
Más del 36% de las tutelas presentadas en los últimos cinco años están directamente relacionadas con la entrega inoportuna de medicamentos o insumos médicos.
Esta situación ha obligado a la Supersalud a asumir un liderazgo técnico y sancionatorio sin precedentes.
Cuatro pilares centrales del plan de choque
La intervención obligará a EPS, IPS, gestores farmacéuticos y autoridades territoriales a actuar bajo una estricta vigilancia. El plan se enfoca en cuatro propósitos esenciales:
Eliminar Causas Raíz: Identificar y corregir de inmediato las fallas administrativas, logísticas y financieras que generan las demoras.
Garantizar Continuidad y Calidad: Asegurar que cada fórmula médica se cumpla sin interrupciones y con los estándares de calidad requeridos.
Blindar Recursos Públicos: Fortalecer la vigilancia sobre el flujo y destinación de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) para evitar desvíos o usos irregulares.
Agilizar PQR: Reducir "drásticamente" los tiempos de respuesta y lograr el cierre definitivo de las quejas y reclamos relacionados con medicamentos.
El plan de choque se desarrollará en tres etapas: Acciones Inmediatas, Seguimiento y Control, y Cierre y Evaluación.
1. Acciones Inmediatas en el Territorio
La Supersalud ha detallado cinco acciones de choque en esta fase:
- Visitas Sorpresa: Realización de auditorías y verificaciones integrales sin previo aviso a EPS, IPS y gestores farmacéuticos.
- Requerimientos Formales: Órdenes con plazos perentorios y seguimiento diario a los actores.
- Mesas Técnicas Obligatorias: Espacios de concertación y solución de controversias.
- Revisión Financiera Exhaustiva: Análisis del flujo de recursos entre los diferentes actores.
- Mecanismos de Conciliación: Activación para la recuperación de cartera, evitando que las disputas de pago afecten al usuario final.
2. Seguimiento y medidas de control
En esta etapa, la Superintendencia mantendrá un monitoreo continuo y en tiempo real. Cuenta con facultades sancionatorias que incluyen:
- Imposición de medidas cautelares.
- Aplicación de sanciones económicas.
- Emisión de órdenes administrativas.
- Extensión o prórroga de intervenciones a entidades en riesgo sistémico o por manejo irregular de recursos.
3. Cierre y evaluación
Finalmente, se realizará un análisis integral de los resultados, una verificación independiente del impacto real en los usuarios, y el cierre definitivo de las PQR priorizadas, consolidando las mejoras estructurales y determinando responsabilidades en caso de incumplimiento.
La Supersalud ha dejado claro que tomará medidas inmediatas "cuando detecte riesgos para la vida o la dignidad de los usuarios", marcando una intervención crucial para proteger el derecho a la salud en el país.
