En el marco del Game Changers Fest, celebrado en Bogotá entre el 8 y 10 de agosto de 2025, Simón Borrero, CEO y cofundador de Rappi, compartió su visión con los asistentes e instó a los emprendedores a abandonar la zona de confort. Fue enfático: “Hay que lanzarse, arriesgarse, saltar al vacío”, señaló, asegurando que ese impulso genera confianza interna y abre nuevas perspectivas.
Durante su intervención, relató cómo Rappi pasó de una idea local de delivery a convertirse en el primer unicornio colombiano, con valuación multimillonaria y presencia internacional. Subrayó la importancia de asumir responsabilidades, plantearse retos que “den nervios” y confiar en el equipo para complementar fortalezas.
Además, Borrero advirtió que emprender no es una ruta segura: es esencial aceptar la posibilidad del fracaso, entender que el riesgo es parte del camino y aprender del proceso. Aconsejó rodearse de colaboradores con visiones distintas, pues la diversidad potencia la innovación.
Este discurso se alinea con la filosofía de muchos ecosistemas de startups: quien espera certezas absolutas difícilmente empieza. El reto está en construir una cultura que celebre el aprendizaje de los errores y haga del salto al vacío un ejercicio estratégico, no impulsivo.