El mundo católico está de luto. Este lunes, a las 7:35 de la mañana (GMT), falleció el Papa Francisco a los 88 años de edad, tras una larga lucha contra una neumonía bilateral que lo mantuvo hospitalizado durante 38 días en Roma. La noticia fue confirmada minutos después, a las 7:47 GMT, por el cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell.
“Queridísimos hermanos y hermanas, con profundo dolor debo anunciar el fallecimiento de nuestro santo padre Francisco”, declaró el cardenal Farrell en un emotivo mensaje desde el Vaticano.
Francisco, nacido Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires, Argentina, fue elegido como el Papa número 266 de la Iglesia Católica el 13 de marzo de 2013. Se convirtió en el primer pontífice latinoamericano y en el primero perteneciente a la Compañía de Jesús, marcando un hito en la historia eclesiástica. Su papado se caracterizó por un enfoque en la humildad, el diálogo interreligioso, la justicia social y el cuidado de la creación.
El Sumo Pontífice fue dado de alta del hospital el pasado 23 de marzo, justo a tiempo para ofrecer su último saludo público durante la celebración de la Pascua, el Domingo de Resurrección, en la Plaza de San Pedro. A pesar de su visible debilidad, se dirigió a los fieles con palabras de esperanza y un gesto de despedida que, sin saberse entonces, sería el último.
“A las 7:35 de esta mañana, el Obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre. Toda su vida estuvo dedicada al servicio del Señor y de Su Iglesia. Nos enseñó a vivir los valores del Evangelio con fidelidad, valentía y amor universal, especialmente en favor de los más pobres y marginados. Con inmensa gratitud por su ejemplo de verdadero discípulo del Señor Jesús, encomendamos el alma del Papa Francisco al infinito amor misericordioso del Dios Uno y Trino”, expresó el cardenal camarlengo.
Con su partida, se cierra una era de profundas transformaciones para la Iglesia Católica. El mundo despide a un líder espiritual cuya sencillez, compromiso con los excluidos y mensaje de amor dejaron una huella imborrable.
