El secretario de Salud, Gerson Bermont, advirtió que la cartera de la EPS con la red pública de la capital pasó de $35.334 millones a más de $90.000 millones, poniendo en riesgo la atención de miles de usuarios.
El secretario de Salud de Bogotá, Gerson Bermont, ha lanzado una fuerte alerta sobre el deterioro de la situación financiera y operativa de la Nueva EPS con la red pública hospitalaria del Distrito, tras la intervención que inició la Superintendencia Nacional de Salud en abril de 2024.
Bermont calificó la intervención como "nefasta para la red pública de Bogotá", al revelar que la deuda de la EPS con los hospitales de la ciudad se ha triplicado en un periodo de 17 meses.
Según las cifras compartidas por la Secretaría de Salud, la cartera total de la Nueva EPS con los centros de atención del Distrito pasó de $35.334 millones al inicio de la intervención a $90.558 millones con corte a septiembre de 2025.
Impacto en la Atención y Denuncias de Usuarios
El secretario Bermont aseguró que, mientras antes la Nueva EPS era más cumplidora, "hoy no pagan, no contratan y no entregan medicamentos". Esta falta de recursos pone en riesgo la sostenibilidad de la red pública, afectando directamente la capacidad de los hospitales para operar, adquirir insumos y pagar nóminas.
El pronunciamiento se suma a las advertencias de la Personería de Bogotá, que ya había alertado sobre un posible “colapso operativo” de la Nueva EPS.
- Según el Ministerio Público Distrital, el 22% de todas las quejas recibidas contra EPS en la capital corresponden a esta entidad.
- Los reclamos de los afiliados se concentran en:
- Demoras prolongadas en la entrega de medicamentos.
- Dificultades para conseguir citas médicas, especialmente con especialistas.
- Afectaciones en la red hospitalaria debido a la falta de pagos.
Tanto la Secretaría de Salud como la Personería han hecho un llamado urgente a la Superintendencia Nacional de Salud, pues denuncian que la intervención, en lugar de solucionar los problemas, los ha profundizado, comprometiendo el derecho fundamental a la salud de más de un millón de afiliados en la ciudad.
El Distrito insiste en que no puede seguir asumiendo el déficit de la EPS y urge a tomar medidas de fondo para proteger a los usuarios y la estabilidad del sistema de salud en Bogotá.
